Cambiar, ¿para qué?
No quieres cambiar. Y qué? No pasa nada. Escribo este email pensando en muy buenos amigos, que no han cambiado nunca de trabajo. Y están muy bien así. El trabajo les ofrece todo lo que necesitan para el bienestar profesional: tareas interesantes, buen ambiente de trabajo, estabilidad, un sueldo correcto… y no se plantean un…