Hay veces, que encuentras gente perdido en las estaciones. Se piensan que va a pasar un tren. Esperan, pero no se dan cuenta que la estación hace años que ha cerrado. Se ha quedado obsoleta, ha dejado de funcionar y de ser parte de la ruta ferroviaria. Pasan los años… y nunca pasa el tren soñado.
Otras veces, encuentro personas que esperan un tren. Y, sin embargo, no están en la estación. Ni siquiera han comprado billete. Creen que la red ferroviaria se construirá de nuevo y, con un poco de suerte pasará por su casa o trabajo… y esperan y esperan.
En ocasiones, el no planificar o el ir siempre a última hora, te hace perder el tren. Llegas demasiado tarde… querías terminar algo. Y se ha ido. Pensabas que esto no te iba a pasar. Has perdido tu billete y no hay reembolso.
Hay otras personas que siguen otra estrategia. Quieren ir a un lugar. Buscan la manera de ir. Si no hay trenes, cogen el coche. Y si no tienen coche, empiezan a caminar. Saben que caminan en la dirección correcta y disfrutan del camino.
Saben que algún día llegarán donde se proponen.
… ¿y tú, estás en la estación… o has empezado a caminar?