Conozco gente que tiene tres jefes… En principio, sólo era uno – eso sobre el papel. Pero a la practica reportan a tres. Su jefe, “jefe”; otro director porque no sé qué y el otro porque no sé cuánto. Para volverse loco.
Hay gente que tiene dos. El “jefe” normal y luego otro; que pide explicaciones cuando no toca.
Luego hay gente que tiene uno. No se puede equivocar. Tiene que tenerlo contento y formar un equipo. Trabajar para cumplir y dar explicaciones cuando se las piden. Pero sólo a uno.
También hay algunos que no tienen jefe. Y no son emprendedores. En realidad buscan un jefe porque están sin trabajo.
Si es así, que tu jefe -que eres tú- te ponga objetivos. Que los evalúe. Que te motive. Que te felicite cuando lo haces bien. Que te dé la reprimenda cuando lo haces mal…
Si no, puede ser que te quedes sin “jefe” toda la vida!
Ojo a las organizaciones matriciales, ya sea por geografía o por complejidad organizacional.
Cada vez más, dependemos “funcionalmente” de un/a jefe que puede estar en otra ciudad o país, “geográficamente” del/la responsable de país, y luego lo que yo llamo “operativamente” del/la que tienes en el día a día (que equivaldría al que mencionas como jefe “jefe”).
Como dice la ley de la física, nada se destruye todo se complica 🙂
Buena semana a todos,
Marina