Todavía me acuerdo del día que me hicieron hacer un pequeño ejercicio. Se trataba de escribir una lista las personas importantes de mi vida e ir asignando “tiempo” a cada una de ellas, por orden. Es un ejercicio interesante, ¡os lo recomiendo!
A mí me dejó bastante impactada. Después de mucho pensar, conseguí hacerme la lista. La gracia era hacer luego la agenda “semanal” en función de esta lista. Asignar tiempo primero, a las personas IMPORTANTES y luego, a todo lo demás. Pensé durante mucho tiempo, y bueno, por fin conseguí hacer mi pequeño tetris de tiempo semanal. Para ser honestos, me hubieran faltado varias horas más pero, por suerte, el tiempo es lo único JUSTO de verdad… todos tenemos el mismo, ni más ni menos.
Y… cuando acabó el ejercicio, después de ver toda la lista faltaba ALGUIEN.
Repaso y repaso… y nada.
Vuelvo a pensar en la gente importante. Y vuelvo a pensar que mi orden es correcto. Sólo anhelo, poder tener más tiempo, para poderlo dedicar a quien yo más quiero pero claro… eso es imposible.
Y vuelvo a repasar. Y… después de un buen rato me di cuenta de algo…
Faltaba YO en la lista.
Y es una de mis preguntas claves, en mis sesiones de coaching…. y TÚ dentro de TUS PRIORIDADES, ¿en qué ranking estás?
¿Lo habéis pensado?
Totalmente de acuerdo, somos lo más importante que tenemos (a nosotros mismos) y es a lo que menos tiempo le dedicamos por desgracia 😉
Un saludo Maite.
Es verdad… Es una historia real! Muchas gracias por el comentario